Violación de la ley de memoria histórica: La Junta justifica y la consejera protege apologías franquistas

 

El IES Núñez de Arce, centro público situado en Valladolid, se ha visto involucrado en un revuelo mediático en el que medios de comunicación, administraciones educativas y un sinfín más de interferencias con la realidad del caso.

El centro publicaba en sus redes sociales oficiales unas imágenes que conmocionaban a gran parte de la comunidad educativa, en esta publicación la cual cabe mencionar el centro de estudios eliminaba el viernes 10 de diciembre, observábamos detalles que hicieron saltar todas nuestras alarmas, desde las imágenes iniciales hasta la propia descripción de la publicación en la que citando textualmente el centro “Los alumnos de 2º de Bachillerato visitaron el pasado día 12 de diciembre el Valle de los Caídos, el Monasterio del Escorial y el Palacio de la Granja, en una actividad organizada por el departamento de Geografía e Historia”, tras más de dos años del cambio de nombre del Valle de los Caídos por el Valle de Cuelgamuros, el centro que ha basado su defensa en la “neutralidad ejemplar” manteniendo el nombre referente a la dictadura.

Días después de la publicación de estas imágenes, desde el Sindicato de Estudiantes de CyL comenzamos a organizarnos para dar una respuesta consecuente y exigir que lo que de si ya era un escandalo tuviera repercusión en el centro de estudios.

Cabe destacar que el Valle de Cuelgamuros no dispone de interés documental de ningún tipo, en la actualidad este “monumento” construido a base de explotación sirve de lugar de referencia para nostálgicos del régimen y exhibición de simbologías franquistas.

A principios de enero, fuentes cercanas a nuestra organización facilitan una serie de evidencias que hacen que la situación del caso cambie por completo, desde entonces esta excursión pasó de ser un destino reprochable a una violación demostrada de la ley de memoria histórica democrática.

El día 3 de enero nuestra organización publica en redes sociales la primera denuncia de la situación. Tras unos días de máxima difusión comenzamos una labor intensiva de documentación en la que descubrimos datos como la afiliación de uno de los docentes del centro de estudios, más concretamente del departamento impulsor de la excursión, con el “seudo-partido” Falange Española de la Jons.

Días después de este descubrimiento ratificamos definitivamente la información tras una publicación de esta organización en redes sociales en la que afirma “Que los profesores pierdan el miedo a la censura de la izquierda española”.

Complementariamente otro “seudo-sindicato” vinculado a la organización falangista, emite un comunicado en redes sociales en el que confirma la existencia de cantos fascista durante la actividad del centro. En un intento de desautorizarnos y fomentar el fascismo estas organizaciones han conseguido proporcionar una base más sólida todavía a las más de cuatro denuncias presentadas.